jueves, 21 de febrero de 2013

Laboratorio de diagnostico clínico veterinario


El laboratorio de diagnostico clínico veterinario SIDIVET,es el  primer laboratorio especializado en equinos, que obtiene el registro  ante el ICA, ubicado en la sabana de Bogotá (cajica).

Los laboratorios de diagnóstico veterinario que obtengan el registro ante el ICA, tienen el respaldo  técnico oficial y demás requisitos legales para realizar sus respectivas labores.


 “Los laboratorios registrados deben cumplir con altos estándares de buenas prácticas para proporcionar confiabilidad en los resultados analíticos emitidos, los cuales se incorporarán al  sistema de vigilancia epidemiológica veterinaria del ICA como un componente importante para la sanidad animal del país”

SIDIVET es considerado como una opción importante para instituciones y profesionales que requieran servicios de apoyo diagnóstico de enfermedades animales a nivel nacional, entregando resultados que cumplan plenamente las especificaciones de confiabilidad, oportunidad, imparcialidad e independencia, contando con infraestructura física y tecnológica adecuada, ofreciendo un amplio portafolio compuesto por pruebas diagnósticas de gran sensibilidad y especificidad debidamente certificadas, con esta finalidad se incorporó el sistema de gestión de calidad ajustado a la norma ISO 9001 versión 2008.

Cuenta con el personal idóneo y comprometido  guiados por la Directora científica  Dra. Danny Mejía, médica veterinaria-especializada en laboratorio clínico, títulos otorgados por la universidad de ciencias aplicadas y ambientales (UDCA).


A lo largo de su vida académica la Dra. Mejía no ha cesado su interés por el conocimiento es por eso que tiene, innumerables reconocimientos por su participación y asistencia en seminarios, diplomados, congresos dentro y fuera del país, estamos seguros que continuará cosechando beneficios en pro del medio para el cual se desenvuelve. 
Competencia de caballos de paso fino de 72 a 90 meses Ponce Internacional 2012.

http://www.youtube.com/watch?v=iPbjYqtrB4g


El paso, el trote, el galope y el galope largo


  • EL PASO: dentro del paso hay cuatro modalidades: paso libre, paso medio, paso reunido y paso largo. 
En todas estas modalidades, hay cuatro tiempos en cada tranco, uno por cada casco que se apoye en el suelo. 
Un buen paso será aquél en el que sea posible contar "uno, dos, tres y cuatro" regularmente.
Siempre habrán dos cascos en el suelo a la vez, la secuencia será o debería ser: pie izquierdo, mano izquierda; pie derecho, mano derecha.
  • EL TROTE: hay cuatro tipos de trote: de trabajo, reunido, medio y largo.
    En todas las modalidades, el trote tiene dos tiempos, en el que el caballo mueve pie izquierdo, mano derecha; pie derecho, mano izquierda.
    El cuello se acorta y se queda quito.
    Un buen trote será aquél en el que sea posible contar " uno, dos, uno, dos"
  • EL GALOPE: es el aire de los tres tiempos más la pausa.
    Cuando se galopa correctamente, deberemos notar y poder contar " uno, dos, tres, pausa; uno, dos, tres, pausa..."
     

La pausa es el momento de suspensión, que es cuando el caballo tiene los cuatro cascos en el aire. Dependiendo de a qué mano galope el caballo, la secuencia de los tiempos será distinta, por ejemplo, si galopa a mano derecha, la secuencia será: pie izquierdo, mano izquierda y pie derecho a la vez, mano derecha seguido de la suspensión.
  • EL GALOPE LARGO: Este aire es sin duda el más rápido de todos. Aquí el caballo se estira abarcando el máximo terreno posible.
    Tiene cuatro tiempos.
     

A mano derecha, la secuencia será: pie izquierdo, pie derecho, mano izquierda, mano derecha, suspensión.

A manos izquierda será al revés.
  • ¿QUÉ ES LA TRANSICIÓN?
    Cuando cambiamos del paso al trote, o del trote al galope, incluso directamente del paso a galope estamos realizando una transición, de la misma manera que cuando pasamos del galope al trote y del trote al paso. Éstas deben hacerse con la mayor suavidad posible y con un buen entrenamiento. No es fácil realizarlas correctamente y sin desequilibrar al caballo.
    Se necesita una buena obediencia del caballo a su jinete, una buena preparación y una buena posición de éste sobre su caballo.

domingo, 17 de febrero de 2013

Normas para una alimentación correcta


1. Respetar diariamente el horario de las comidas, dado que el caballo es un animal se acostumbra a las rutinas y un cambio de horario favorece a provocarle estrés e inseguridad.
2. Dar de comer poco y a menudo, porque el estomago del caballo es pequeño y si se le da más de 2.5 kg de alimentos concentrados ya sea balanceado o granos por ración, le podría provocar un cólico, se recomienda dividir las comidas en tres raciones diarias.
3. Dar más forrajes que alimentos concentrados, dado que proporcionándole primero el forraje y en gran cantidad, se estimulan los movimientos peristálticos de los intestinos y podrán digerir mejor los alimentos, además hay que acordarse de que el aparato digestivo de los caballos fue desarrollado para el consumo de pasto. 
4. Alimentar según la condición, según el trabajo que realice, su estado físico y tamaño.
5. No realizar cambios bruscos en la alimentación.
6. No montar a caballo inmediatamente después de la ración, dado que durante la digestión, la sangre se concentra en el aparato digestivo y el esfuerzo que conlleva un trabajo limitaría el rendimiento.
7.  Dar de comer alimentos de buena calidad, el polvillo, los hongos o con mal olor puede provocar serios problemas respiratorios.
8. Proporcionarle algún alimento suculento cada día, siempre y cuando no tengan acceso a pasturas durante el día.
9. Tener acceso al bebedero durante las 24 hs.
10. Mantener comederos y bebederos limpios. 

Origenes del Caballo


El primer espécimen conocido hasta el momento, perteneciente a la familia de los equinos, fue el Eohippus, se calcula que tiene aproximadamente unos 55 millones de años de antigüedad. El fósil de este ejemplar fue descubierto en Norteamérica en 1867. Medía unos 30 centímetros, con almohadillas en las patas (cuatro delante y tres detrás) habitando en las zonas selváticas y en los pantanos. Este ejemplar se propagó hacia Europa en el periodo denominado Eoceno.

La especie evolucionó debido a los cambios climáticos, dando como resultado diversos tipos como son: el Mesohippus que era un poco mayor, tenía tres dedos en cada pata y una dentadura más eficiente que le permitía comer una vegetación más variada, existiendo hace 25 a 40 millones de años, el descendiente de este ejemplar es el Miohippus, después el Merychippus, este ejemplar tenía cierto parecido al burro, con la diferencia de que poseía un dedo mayor en el centro, lo cual le ayudaba a alcanzar gran velocidad y recorrer mayores distancias.


Los ejemplares que sobrevivieron comenzaron a extenderse desde Asia hasta Europa y África siendo los antecesores del caballo que hoy en día conocemos como Equus caballus. Su evolución corresponde principalmente a cuatro tipos básicos, de los cuales descienden las razas existentes; el caballo del bosque de tipo sólido, con cabeza y cascos grandes, es muy posible que fuera el fundador de los caballos de sangre fría y razas de tiro, el caballo de la meseta, de tipo más fino, descienden los pequeños y resistentes caballos mongoles semisalvajes. El caballo de la estepa, de un tipo más ligero, originó las razas orientales, como el árabe y el barbo, los cuales son los antecesores de la pura sangre. El caballo de la tundra era de tipo grande y pesado, como el Yakut proveniente de las regiones polares, parece ser el único descendiente. 

Existen evidencias que el caballo fue domesticado hace cinco o seis mil años, los primeros en incursionar en la domesticación del caballo fueron las tribus nómadas, a medida que viajaban a través de las regiones de los mares Caspio y Negro.
En la clasificación de los caballos posglaciares del Viejo mundo que manejaron los primeros domesticadores no se habla de especies sino de varios tipos. * Tomado de: http://www.caballosypastoreo.galeon.com